De reojo

Si tan solo pudiera recordar,
la diferencia entre vigilar y soñar,
todo lo confundo e intento
decir la verdad mientras miento.

Estoy cansada, pero no quiero dormir,
me siento feliz, pero no quiero sonreir.
Solo quiero la cabeza apoyar
para mis ojos poder cerrar.

Parpados de ventanas que se han trabado
y de observar tu sombra no se han cansado.
¿Qué esconde el final de la noche?,
no es más que la claridad del día.

Ahora me pregunto si veré el amanecer;
si podré otra vez mis sueños recordar;
si mi alma entre tus caminos se volverá a perder,
mientras pueda la melodía de tus versos escuchar.

Entonces que tus besos me manden a un profundo sueño,
terreno árido donde tu eres el único dueño,
señor del recuerdo y la imaginación,
guia en este camino hacia la dulce perdición.