Al cargar la burla infame de las horas,
que corren y se detienen entre callejones,
pongo a prueba las lecciones aprendidas:
el cómo controlar las pasiones.
Entonces aplicaré la experiencia que me respalda,
aquella que evita que entre ilusiones sueñe;
que tu sombra de mi corazón se adueñe;
que ante el miedo me refugie en tu espalda.
Ataré las riendas del deseo contra voluntad,
domaré los suspiros al despertar
y le cortaré las venas al torrente del amor,
mientras tus pasos no se escuchen en esta ciudad.
Encenderé las velas y evitaré la vigilia
pero domriré intentando soñarte
mojaré mis pies en el mar cuando quieras tocarme
que sean las olas esos brazos que logren acercarte.
La negación será mi única defenza
ante aquello que proclamas con fuerza
armando palabras y develando secretos
cuya certeza depende del tiempo.
Horas y hemisferios nos alejan sin piedad
razón por la que espero con necesidad
un refugio, una vacuna encontrar
que me haga inmune a muy alto volar
y luego caer contra la llanura de la soledad
Mi armadura va perdiendo su efectividad
su fortaleza se desvanece con facilidad
mis estretegias ceden ante tus tácticas
la distancia favorece tus practicas
Se mantendrá la historia a tu regreso
todo florecerá con la misma fuerza
que tus labios cada noche profesan
solo espero no cargar con el peso
de la ilusión gastada entre sueños
que nunca nos prepararon para la realidad.
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2 comentarios:
En las ausencias el corazón se magnifica en anhelos que devoran a la razón... se ama o no se es.
La armadura se vuelve seda en la espera.
Muy bello escrito.
Lo sentí...
Fachi, eres increíble.
Besos y Feliz Navidad,
Clau.
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